Esperar siempre me pareció de cobarde, por
eso tampoco puedo decir que estoy haciéndolo. No creo estar esperando pero algo
en mi interior me dice que sí; que efectivamente eso es lo que estoy haciendo. Estoy esperando que mi incondicionalidad le
haga falta; que piense en lo que fue aunque sea un minuto al día, un minuto
a la semana, al mes.
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